Promedio Ponderado, GPA, Tercio Superior: ¿Qué es eso?

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No hay duda que cada vez que nos preguntan por nuestro promedio ponderado (GPA, grade point average en inglés) nuestra cara toma diversas formas; se ilumina para expeler con voz potente un guarismo envidiable; fruncimos el ceño y nos hacemos los meditabundos cuando el dichoso guarismo no es el mejor; o finalmente ponemos cara de incredulidad y nos atrevemos  preguntar ¿qué es eso?.

El promedio ponderado es el resultado de sumar las notas finales que hemos obtenido en un periodo y dividirlas entre el número de créditos. Eso nos da un promedio que nos sirve para ubicarnos o compararnos con nuestros compañeros (competidores). Si nuestro promedio ponderado es mayor al promedio de la clase, estaremos en mejor posición. Si no lo está, habrá que poner las barbas en remojo.

Pero ¿para qué sirve el promedio ponderado? En mis años de docente universitario no he perdido oportunidad de preguntarle a mis alumnos por el dichoso promedio y hacerles ver que no sólo es un indicador, sino que representa mucho mas, veamos.

En el colegio el promedio ponderado nos sirve para ubicarnos en comparación con nuestros compañeros. El estar dentro de los primeros puestos nos hará merecedores de recibir los honores a fin de año, con lo cual nuestra familia estará orgullosa de nuestro desempeño académico. Pero ahí no acaba la cosa, ahora las universidades buscan  a “esos primeros puestos”, aquellos que hayan ocupado durante los últimos años el Tercio Superior de su promoción (esos treinta mejores de cada cien). Para ellos, el premio puede ser significativo: ingresar a la universidad solo con una entrevista, su conocimiento académico ha quedado demostrado por su promedio ponderado durante los últimos años escolares, hurra !!, el resto deberá de sufrir la inclemencia de un verano y preparar – a la antigua usanza- un examen de ingreso.

En la universidad el promedio ponderado también tiene sus propósitos. Ubicarse en los primeros puestos les da el derecho de matricularse primero y con ello escoger los mejores horarios y profesores o los mejores profesores y horarios. Bueno no importa, aquí funciona el libre albedrio y el alumno opta por lo que más le conviene y para aquellos que hemos pasado por las matrículas universitarias somos testigos que una décima menos en el dichoso promedio ponderado podría habernos provocado los “peores horarios del mundo”. Pero aquí no acaba la cosa, el promedio ponderado no solo sirve para una buena matricula, sirve para presentarnos ante el mercado laboral. Las empresas normalmente participan en las ferias laborales de las universidades más prestigiosas en busca de talentos. Para ellas un talento es quien tiene exactamente el mejor promedio ponderado, y comenzamos a escuchar “si eres, al menos, tercio superior”.

Y después que acabamos la universidad ¿me libré del promedio ponderado? No amigo lector, el promedio quedará en tus certificados y los podrás usar cuando postules a una maestría local o extranjera, no todos tienen la oportunidad de ingresar a una buena maestría. Depende entre otras variables de tu promedio ponderado. Y si ingresar a la maestría fue un reto, sustentar el grado será otro. Recuerdo que en la maestría que obtuve no te dejaban graduar si tu promedio ponderado era menor a catorce. Y si de becas se trata, sabes qué variable observarán……? claro el promedio ponderado.

Es cierto que un promedio ponderado superior no te garantiza el éxito profesional, pero sí te abre las puertas a las mejores ofertas laborales. De ahí en adelante depende de tus competencias,  tenacidad y emprendimiento. Si has sido capaz de mantenerte siempre entre los primeros puestos se me hace que serás capaz de lograr el éxito.

* Julio E. de la Puente, MBA. Decano Facultad Administración y Negocios. Universidad Privada Peruano Alemana – UPAL

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