Fintech llegan a movilizar más de US$ 15,000 millones en el Perú
Este tipo de empresas contribuye con la formalización del sistema financiero
¿Qué es una fintech? Según la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), este término hace referencia a modelos de negocio que ofrecen productos o servicios financieros, mediante el uso intensivo de las tecnologías de información, y que pueden traer importantes beneficios para los usuarios.
No solo comprende a los nuevos emprendimientos, sino también a los modelos de negocio sobre plataformas tecnológicas de los bancos y otras instituciones que ya operan en el sistema financiero local.
“La pandemia ha contribuido al crecimiento explosivo de las fintech. En general, este mercado se ha multiplicado. En el 2019 había poco más de 100 en el Perú y ahora deben estar pasando las 200 startups en este sector”, afirmó la coordinadora de Emprendimiento e Innovación de Innova ESAN, Karen Montjoy en informe publicado hoy en el Diario Oficial El Peruano.
Y no solo las fintech se han expandido en cantidad de nuevas empresas en este sector, sino también en los montos que movilizan. “A finales del 2019, las fintech estaban moviendo alrededor de 4,000 millones de dólares; hoy no dudaría en decir que ya están entre 15,000 millones y 20,000 millones de dólares”, subrayó.
Montjoy subrayó que las fintech atienden principalmente a las micro y pequeñas empresas (mypes) porque estos negocios, debido al tamaño, buscan mayor flexibilidad para su financiamiento y transacciones en línea.
Además, tienen oportunidades de expansión en la economía informal que en el Perú es muy grande.
“La informalidad es una gran oportunidad para las fintech porque el sistema financiero es bastante rígido”, subrayó la especialista.
Explicó que para una mype nueva es más difícil solicitar un préstamo en los bancos tradicionales porque les piden un registro del comportamiento crediticio y garantías, entre otros.
Digitalización irreversible
Por su parte, el gerente de Regulación Financiera y Fin Tech de EY Law, Darío Bregante, enfatizó que la digitalización financiera es irreversible en el Perú. “Desde hace unos años las fintech se venían destacando como una tendencia. Las restricciones del año pasado por la pandemia del covid-19 fue el gatillador de su crecimiento”, manifestó.
Agregó que muchas personas que tenían desconfianza de los canales digitales, hoy ya lo ven como una primera opción.
“Antes de la pandemia, mucha gente hubiera preferido acercarse a una ventanilla, pero hoy saben que pueden acceder a préstamos en línea mediante la banca tradicional y también que hay muchas fintech que pueden otorgar el mismo préstamo, inclusive en tiempos más cortos y otras opciones de financiamiento”, precisó Bregante.
Tendencias
El ejecutivo detalló tres tendencias en las fintech en el Perú.
La primera está referida a que abren una posibilidad muy importante para el financiamiento a las mypes. “La reciente Ley que protege de la usura a los consumidores de los servicios financieros (Ley Nº 31143) determina que el Banco Central de Reserva (BCR) ponga topes a las tasas de interés que cobran los bancos y entidades financieras, restringiendo a que los préstamos se otorguen a los que ya tienen récord crediticio”, comentó.
Crowfunding
En el caso del crowfunding o financiamiento participativo financiero, otra norma reconoce que pueden fijar libremente las tasas de interés, comisiones, entre otros. “Eso hace más atractivo mirar este tipo de operaciones de las fintech”, subrayó Bregante.
La segunda tendencia es el desarrollo de las billeteras digitales, que se impulsaron con el reparto de bonos solidarios a las familias más vulnerables; mientras que la tercera tendencia viene por el uso de criptoactivos.
“De hecho, hace poco salió una encuesta que decía que el Perú es uno de los países donde se ha visto un mayor crecimiento en la adquisición de criptomonedas, bitcoines o ethereum, que son dos de las más conocidas”, aseveró.
Fintech y bancarización
Las fintech pueden jugar un papel muy importante en la bancarización del sector informal, destacó el director sénior de Fitch Ratings para Instituciones Financieras de América Latina, Andrés Márquez.
Refirió que la pandemia en el 2020 obligó a todo el mundo a acelerar los procesos de digitalización, incluido el sector financiero, que incrementó notablemente el número de operaciones en línea, lo cual es positivo para la bancarización.
Asimismo, consideró que las fintech no representan una amenaza a la banca en países como el Perú y Colombia, pero, definitivamente, estos nuevos ecosistemas permiten más jugadores en el mercado local, con nuevas características que pueden incrementar la cobertura de los servicios financieros.
Por el contrario, Márquez sostuvo que las fintech forjan alianzas con los bancos, para complementar sus servicios, por lo cual consideró una oportunidad para estas plataformas tecnológicas. “Es más un complemento que una competencia, puede ser aprovechado para bancarizar y ampliar la cobertura”, subrayó.
“Las proyecciones macroeconómicas del Perú lo hacen atractivo para las fintech, también el amplio uso del smartphone, que para muchas de ellas es la puerta de ingreso para ofrecer sus servicios”.
Datos del sector
– Según un estudio de la Asociación Fintech Perú del 2020, la mayoría son empresas jóvenes con menos de tres años de fundación (60%) y solo el 2.6% tiene más de 10 años.
– La mitad de los fundadores tienen más de 15 años de experiencia profesional; el 35.9% tiene entre 15 y 25 años; y el 12.8%, más de 25 años de experiencia.
– El 96.7% de las fintech se concentra en Lima, mientras que un 1% está en Arequipa, el 1.3% en Cajamarca y el 1.6% en Lambayeque.
– El 51.4% de las fintech facturan más de 50,000 soles mensuales y el 24.3% factura entre 10,000 y 50,000 soles mensuales.
– La mayoría de las fintech (56.8%) tiene entre uno y 10 trabajadores; y el 24.3% tiene entre 10 y 30 trabajadores.
– El 46.2% de las fintech crece con sus propios recursos, mientras que el 20.5% requiere un capital semilla.
– El 28.2% requiere entre 100,000 y 500,000 dólares y el 20.5%, más de 500,000; por lo que el 48.7% requiere de inversión.