Minería peruana: lo que no se cuenta
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Si hay algo que debemos reconocer es que en el Perú las narrativas y los relatos que un sector de la política desarrolla contra la minería moderna han cumplido todos sus propósitos. A pesar de ser el sector productivo que debe cumplir de manera estricta los mayores estándares y protocolos ambientales, laborales, sanitarios y de seguridad, hoy existe la percepción, en buena parte de la sociedad peruana, de que la minería no es una bendición, sino una maldición. Aquí, como al socialista Allende en Chile, nadie nos dijo que la minería “paga el pan del Perú”.
Una nueva clase media. Por ejemplo uno de los grandes logros de la moderna minería peruana es haber generado una enorme clase media, sobre todo en las provincias cercanas a las operaciones o proyectos mineros. Así como hoy podemos hablar sin rubor alguno de una clase media alrededor de agroexportación, negar la existencia de una nueva clase media sujeta a la minería sería simplemente una locura ideológica.
INEI. Si bien no existe un documento que demuestre la dimensión, el alcance y el impacto de la minería moderna en la emergencia de la clase media en todas las zonas aledañas a las minas, las cifras que reporta el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) nos da luces claras de ese fenómeno. Por ejemplo, la pobreza en el 2007 en la provincia de Espinar era alrededor de 64.7%, en tanto que en el 2018 pasó a 23,9%; es decir una reducción de 40%. En Chumbivilcas, otra de las provincias altas cusqueñas, la pobreza en el 2007 pasaba el 85%, pero ha descendido hasta casi 42%.
Reducción de la pobreza: ¿Qué provocó semejante reducción de la pobreza? ¿Los programas sociales del Estado? ¿O la inversión privada alrededor de dos operaciones mineras, Antapaccay en Espinar y Hudbay en Chumbivilcas? Para el suscrito es evidente que la responsabilidad de semejante milagro antipobreza fueron las inversiones mineras.
Para apuntalarlo mencionaremos algunos datos que dan soporte a nuestra tesis. Solo en el 2019 Antapaccay hizo compras a sus proveedores locales en Espinar por alrededor de S/ 174 millones. Las Bambas, para poner otro ejemplo, entre el 2017 al 2019 realizó compras locales y regionales por un monto de S/ 600 millones; es decir casi 200 millones por año.
Burguesía local. Cabe preguntarse ¿dónde están todos estos ciudadanos que según el INEI dejaron de ser pobres? Pecariamos de inocentes si aseguramos que se hicieron ricos, pero ahora dejaron de ser comuneros para convertirse en empresarios. Así de simple.
La educación. En la Evaluación Censal de Estudiantes (ECE) del 2019 hay varios datos relevantes. Los resultados de Lectura y Matemática en estudiantes del segundo de secundaria indican que la UGEL Espinar supera el promedio regional. En Matemática, por ejemplo, el resultado satisfactorio es del 29%, superior a otras provincias (de hecho en la provincia de Cusco el resultado satisfactorio está en 24%, y en Paucartambo es de apenas 5.5%).
¿Que hace posible semejantes nùmeros positivos en Espinar? Sencillo. La implementaciòn del megaproyecto educativo denominado Central de Recursos Educativos Especializados de Espinar (CREE), que imparte clases a más de 61,000 alumnos de toda la provincia de Espinar, y que brinda una preparaciòn semejante a la de los Colegìos de Alto Rendimiento (Coar). La educación es un piso de igualdad que en Espinar parece construirse para todos.